Kerria japonica 'Pleniflora' un arbusto agradecido y sin complicaciones

Hace dos años os mostré el arbusto recién plantado en mi jardín. Entonces no lucía como ahora. En el vivero no se les ocurrió otra cosa que cortar sus ramas a lo bruto todas a la misma altura sin tener en cuenta si eran viejas o nuevas...en fin, un desastre.
Este año ya está empezando a ser un arbusto asentado y en un par de años se habrá convertido en una belleza.
En aquel artículo os hablé de las condiciones de cultivo y colgué en junio del año pasado, tras la floración, un tutorial sobre su poda. Quién tenga interés en leerlos puede pinchar y ver la información que ofrecí en esos artículos.
Hoy únicamente quería mostraros este agradecido arbusto que no tiene complicación alguna de cultivo.


Comienzan a abrirse las flores de Kerria japonica 'Pleniflora' sin brotar sus hojas y cuando está en plena floración es cuándo empieza a verdear.

Dentro de una semana estará más bonita aún porque habrán empezado a salirle las hojas pero pronostican lluvia, viento y nieve para los próximos días en mi zona, así que no he querido arriesgarme y he preferido compartir con vosotros estas fotografías que tomaron hoy de esta zona de mi jardín.
Creo que únicamente tiene dos exigencias. Una es la poda adecuada para evitar que en poco se convierta en un arbusto enmarañado sin producción apenas de flores. 
La otra es un gran espacio. En algunas temporadas puede alcanzar bien casi 150/200 cm y un contorno considerable. Sin duda no es un arbusto para plantar entre otros de forma apretada. Precisa tener aire alrededor para que se vea realmente bonito. Sus ramas largas y curvadas por el peso de las flores lucen toda su belleza si pueden caer arqueadas alrededor de la planta sin apretarse contra otras plantaciones. Y si está plantada con algo de altura para tener más largo aún para inclinarse y volcar sus ramas, mejor que mejor!!




Esta zona a ambos lados de la escalera de piedra es la más alejada del jardín. He procurado que las plantaciones que tiene este espacio sean de las fáciles, de las que no dan problema y sobretodo de las que aguanten sin mucho riego. De ahí que haya plantado matas de Lavanda officinalis, Rosmarinus officinalisEuphorbia characiasElaeagnus x ebbingeiBeschorneria YuccoidesBrachyglottis greyi... En fin, arbustos duros y resistentes, sin demasiadas exigencias.
No porque buscara que este rincón fuera fácil de cultivar dejaba de ser importante para mí la combinación de texturas y colores de la vegetación. Por eso varias de las plantaciones son de hojas grises, porque son las que mejor contraste hacen con el verde de este gran arbusto. Además prefería alguna de estas fáciles plantaciones coincidiera en la floración con la kerria, así que introduje rizomas de Iris germanica

Planté rizomas de Iris germanica en el arriate del lateral de la rampa de acceso del coche precisamente para que cuando llegue a ser adulta y sus ramas se arqueen aún más llegando más bajo, estén próximas a las flores de los lirios porque me encanta el contraste de estos dos colores complementarios que en mi clima se producen a la vez. Me parece que queda muy bonitas las dos plantaciones próximas. Combinan a la perfección sus texturas y colores tan distitos, sus dos verdes tan diferentes hacen bonito juntos. Uno verde jugoso y cálido como el de Kerria y el otro azulado y frío como los lirios. 
Creo que meteré algún rizoma más entre las lavandas para que los tallos florales de los lirios suban y se metan entre las flores amarillas de la Kerria...Sí, pienso que haré eso :-)
Si estamos atentos y no nos dejamos pasar el momento ideal de la poda nos ofrecerá una segunda floración más contenida pero floración al fin y al cabo. Se lleva el otoño echando flores sueltas la pobre sin recibir ningún cuidado especial. Este año, era diciembre y aún tenía algunas flores abiertas. No es la floración primaveral pero bueno..
En los viveros hay la manía de cortarlas a 60/70 cm así que el primer año olvidaros de tener en el jardín un arbusto bonito. Tendréis que esperar que eche ramas nuevas en primavera/verano que serán las que florezcan la siguiente temporada. No sufráis porque tiene una extrema facilidad para rebrotar desde el suelo. En realidad no llega a formar una estructura permanente leñosa ya que las ramas brotan desde el suelo y en poco más de dos años tienden a marchitarse y cuando no, dejan de florecer. Por eso es tan importante podar bien este arbusto para eliminar toda la madera muerta e improductiva y fomentar el rebrote de ramas floríferos y saludables.
Aguanta bastante bien riegos que no sean muy abundantes y los nutrientes que precisa no superan los que aportéis a cualquier otra plantación de vuestro jardín. No precisa estacarse (todo lo contrario!!) Ni pulgón, ni oídio, ni otras enfermedades...sana como una rosa!! Merece la pena que la introduzcáis en vuestro jardín. Ya veréis como estaréis encantados con ella.
Al final del verano puse el año pasado otra en la entrada del jardín secreto y, lo que os decía, como venía cortadas sus ramas pues este es el lamentable aspecto que luce ahora la pobre. El año que viene comenzará a ser otra estrella más en el jardín y se verá mucho más bonita.

Trasplante provisional de planteles antes de plantar en los bancales del huerto

Son tantas las ganas que tenemos de comenzar la temporada de huerto que en ocasiones nos precipitamos y nos adelantamos demasiado en el tiempo a la hora de comprar los planteles.

Eso me ha pasado a mí este fin de semana. 
Me llevaron a un vivero y quién sufre la tentación de traerse para casa una buena variedad de planteles de hortalizas que ves allí? Yo, no. Desde luego!!
El invierno ha sido tan largo y el huerto está tan vacío que la impaciencia te mata. Y luego también piensas que vete a saber cuándo será posible que puedan trasladarte de nuevo a un vivero y que cuando pudiera ser quizás ya están muy escogidos y quedan los que está en peores condiciones. 
Así que nada, me traje cuatro variedades de tomate (de pera, rosa, Cherry y Montserrat) a ver si este año logro que me den alguna cosecha digna porque lo que es hasta ahora la verdad es que o no he tenido suerte o debo estar haciendo algo mal porque muchos tomates lo cierto es que no he logrado recoger de momento.



Cada año me pasa igual, me cuesta bastante encontrar planteles de berenjenas blancas. Ayer llegué a pensar que no había pero por fin, después de mucho rebuscar encontré un pack de seis que estaban en buenas condiciones. 
Esta vez además de hortalizas que ya he cultivado en temporadas pasadas como la guindilla vasca o lechugas hoja de roble, me he animado a probar a ver qué tal se dan algunas hortalizas que no he cultivado nunca. 
Por ejemplo traje berza gallega porque me encanta hacer caldo gallego y me resulta muy difícil comprarla en los puestos de verdura que ponen en la plaza de mi pueblo. También traje berenjenas de Almagro que lo cierto es que no me entusiasman en absoluto las que como compradas pero por "enredar" y porque soy una antojadiza jajajja
Traje también, a sabiendas de que no tengo un clima adecuado, unas matitas de alcachofas y no me pude resistir a comprar un par de macetinas de berros de agua y es que están tan ricossssss!!
Indudablemente eché al carro una mata de sandía amarilla. Sí, digo bien, amarilla!! No ligeramente amarilla...no, amarilla como un limón!! Me trae recuerdos de cuando niña. Mi abuelo no sé de dónde sacaría las semillas pero siempre cultivaba unas hileras de unas pequeñas sandías que a mí me parecían preciosas!! Con su carne de un bonito color amarillo sobre las que contrastaban sus pipas negras brillantes... Qué bonitas eran! Y qué dulcessss!!
Este año no he traído calabacines normales, me he animado a comprar calabacines redondos. Porque son más ricos? No. Porque son más bonitos! ajajjaja :-) Ay...cómo es una!!
En realidad siempre pienso que no seré jamás una buena hortelana porque trato el huerto como si fuera un jardín. Sé lo que me digo, prima más el sentido estético que la producción, pero bueno, a la vez también voy aprendiendo. No al ritmo que aprendo jardinería porque mi interés por las cosas relacionadas con al huerta no pueden compararse con al curiosidad y atracción que siento por el jardín, pero indudablemente poquito a poco voy cogiendo algo de experiencia con las hortalizas. Tampoco aspiro a ser una gran entendida. Simplemente a cultivar las hortalizas para hacer los gazpachos del verano (tomate, pimento, cebolla, ajo, pepino...) y luego ir introduciendo otras que me haga gracia cultivar más que por el rendimiento que tengan, por la novedad que para mí representa su cultivo y por el aprendizaje que de ello saco.
En fin, el asunto es que para mañana pronostican heladas y para pasado nieve. Es posible que no llegue  nevar pero indudablemente la bajada de temperaturas será importante y lo cierto es que ya esta tarde estaba levantando un viento muy frío
Mi idea al comprar todos estos planteles era aprovechar que mañana venía mi ayudante y que pudiera plantarlos en los bancales pero en vista de las previsiones no he querido adelantarme y arriesgarme a que se congeles o se deshidraten con un viento ta frío como el que sopla.
Los planteles son tan chicos que si no los ponía en los bancales corría el riesgo de que se deshidratara enseguida el sustrato de sus diminutos contenedores pero aún estando plantados en tierra, el viento fuerte y frío también hacía posible que provocara en ellos estrés hídrico y se castigaran demasiado.
Así que he decidido hacer un trasplante provisional en tanto no mejora definitivamente el tiempo.
Tenía comprado de hace bastante unos estupendos contenedores de fibra de coco. Tiene de bueno el hecho de que el material con el que están hechos permite no tener que sacar de ellos los planteles cuando los tenga que poner en los bancales de huerto. Se plantan dentro de la tierra y las raíces los traspasan, desintegrándose poco a poco entre la tierra y llegando a desaparecer. Esto es una estupenda cosa porque así no hay riesgo de que las pequeñas raicillas se rompan al trasplantar a tierra.
La parte del jardín trasero que hay frente a la puerta de la cocina es la de más fácil acceso para mi. Ahí puedo sentarme tranquilamente y ver como van los planteles además de regarlos.
He hecho una mezcla con sustrato de esquejes y plantación mezclado con una buena cantidad de humus de lombriz. Con esta mezcla y en contenedores mucho más grandes será difícil que se deshidraten. Además de que podrán ir nutriéndose en tanto van generando sus pequeñas raicillas cuando se adentren en el sustrato circundante.
Los tomates me gusta ponerlos con el tallo un poco hundido para que esa zona del mismo que queda cubierta con sustrato pueda emitir raíces y así posibilite que la planta sea más fuerte. Por eso he puesto los plantones directamente sobre la base de los contenedores de fibra de coco y he rellenado con sustrato.

Los pack, al estar juntos, no original confusión de las variedades que contienen pero una vez se separan para trasplantarlos a contenedores individuales resulta imprescindible colocar los planteles de las mismas hortalizas bien etiquetados y juntos unos a otros para saber luego de qué variedad se trata.
Una vez bien regado todo me han colgado una manta térmica prendida de la valla metálica cubierta de hiedra. Para que le viento no llegue a levantarla he puesto unos tiestos con peso en sus extremos.
Creo que así estarán protegidos estos días de las posibles heladas y de la nieve. Dentro de unos días seguramente el tiempo mejorará y las temperaturas se harán más suaves ya definitivamente adentrados en la primavera. Será el momento de llevar los pequeños planteles al huerto para comenzar a cultivarlos allí.

Cómo plantar en primavera los bulbos de verano . Azucenas (Lillium orientales)

A principios de mes os mostraba estos bulbos recién comprados y hablábamos en aquel artículo sobre las necesidades de cultivo de las azucenas. Hoy os quería mostrar el paso a paso de la plantación de estos bulbos de verano.

Seguro que la mayoría de vosotros lo sabéis pero para quién lleve poco tiempo en esto de la jardinería aclaremos que los bulbos suelen dividirse en bulbos de primavera y de verano. 
Los bulbos que florecen en primavera se suelen plantar en el otoño anteriorComo ejemplos de bulbos de primavera podemos poner los narcisos, jacintos, tulipanes...
Por el contrario, los que producen sus flores en verano se plantan ahora, en primavera o a punto de comenzar la estación. Son bulbos de verano las dalias, las azucenas, calas, nardos, gladiolos...
Aunque a la hora de agruparlos según su floración hablamos de "bulbos" técnicamente no todos lo son. Por el contrario, algunos son cormos (como los gladiolos), rizomas (como las calas o los Iris) o tubérculos (como las Dalias).
Todos ellos son órganos subterráneos que tienen la capacidad de almacenar nutrientes de manera que tras la plantación brotan de ellos las hojas y las flores y una vez ha terminado la floración y mientras las hojas van secándose, el órgano subterráneo se "recarga" de nuevo y vuelve a guardar en su interior la energía que precisará para la floración de la siguiente temporada.
El día que se plantaron estos bulbos de azucena, el chico que me ayuda dejó este trabajo para última hora y se le echó el tiempo encima de manera que cuando pude ir haciendo las fotografías según él iba trabajando, la verdad es que la luz era ya claramente insuficiente. De modo que os pido disculpas pero he preferido colgar el artículo aunque las imágenes no tengan demasiada nitidez. Espero que mis explicaciones suplan las deficiencias.
Bueno, primero deberíamos elegir el lugar adecuado para estos bulbos de azucenas (Lillium orientales). Les gusta la cabeza al sol pero prefieren que el suelo dónde estén plantados se mantenga fresco y sombreado. Creo que el seto norte, tras esta mata de Choisya ternata, puede ser un lugar estupendo.

Bien, lo primero que hacemos es retirar la capa de acolchado de corteza de madera para que al trabajar el espacio no se nos mezcle con el suelo.

Los bulbos en general y las azucenas en particular detestan los suelos con problemas de drenaje dónde sus raíces estén anegadas en agua. Ese problema en mi jardín es difícil que se produzca en parte alguna debido al tipo de suelo que tiene. Pero además de exigir un perfecto drenaje, crecen mejor en suelos con mucha materia orgánica, mullidos y esponjosos.
De manera que vamos a confeccionar una mezcla de sustratos y otros materiales para agregar y mezclar con el suelo dónde plantaremos estos bulbos.
El suelo de mi jardín drena demasiado así que vamos a incorporar a él algunas enmiendas. Es decir, por su naturaleza arenosa, el agua y los nutrientes tienden a desaparecer hacia abajo con excesiva rapidez. Pienso que realizar una buena mezcla que ayude a retener la humedad  que precisan los bulbos y que a la vez les proporcione los nutrientes que necesitan, va a favorecer su desarrollo.

La turba hace los suelos dónde se incorpora mucho más mullidos. Aumenta la retención de la humedad en ellos y acidifica su pH. 
No entiendo por qué cuesta tanto comprar sacas de buen tamaño. O al menos yo no las encuentro en muchos sitios. Por fin he localizado un vivero algo alejado de mi casa dónde me venden estos sacos de 250 litros. Viene muy comprimida y para usarla se tiene que desprender a grandes terrones. 
Con un cubito de estos tendremos bastante ya que cuando hayamos desmenuzado los terrones aumentará mucho su volumen. Ahora habrá que desmenuzar bien la turba con las manos hasta que se convierta casi en un fino polvo.

Ahora agregaremos un par de cubos de compost. Esta compostera tiene un material que casi está a punto de caramelo pero aún le falta un poquito. No hay problema en incorporarlo al suelo de los bulbos. Simplemente terminará de madurar el poco que le falta mezclado con la tierra del lugar de plantación.

A principios de este año comencé a hacer este compost de hojas secas. Aunque inicialmente las dejé en la compostera de malla plástica vi se secaban con demasiada rapidez así que finalmente las he metido en bolsas negras de jardín y tras humedecerlas bien las he cerrado. La compostaje está iniciada pero ni con mucho se han compostado del todo.

Fijaos qué aspecto más bueno están adquiriendo. Dentro de unos meses habrán formado un magnífico compost que aportará nutrientes y esponjosidad a cualquier suelo dónde lo utilice. Agregaremos dos cubos de estas hojas a medio compostar a nuestra mezcla.

Y por último vamos a incorporar a la mezcla un buen puñado de harina de pescado. Siento haber olvidado hacer la fotografía. Pero vamos, os lo imagináis ;)
Por qué he incorporado este abono orgánico? Pues porque al compost le falta un poquito para estar terminado de hacer y las hojas están sólo iniciado su proceso de compostaje. No he querido arriesgarme a que ambos elementos, en el proceso de maduración que les resta, sustraigan Nitrógeno al suelo dónde están plantados estos bulbos e impidan que crezcan correctamente. De ahí que le haya añadido la harina de pescado que tiene una proporción bastante alta de Nitrógeno (NPK 10-6-0).
Como os comentaba hace ya tiempo en una entrada en la que trataba los abonos orgánicos y enmiendas del suelo, la harina de pescado conviene trabajarla con el suelo y dejarla un poco enterrada bajo el acolchado por eso la he mezclado con las otras enmiendas al hacer la mezcla. Durante un par de días emite un ligero olorcillo que a Iker le resulta muy tentador y la verdad, no me apetece encontrarme con los bulbos de azucenas esparcidos por el camino ejejjeje
Mientras mi ayudante hace la mezcla un par de mirlos descarados se dedican a hurgar en mis acolchados y a hacer agujeros en el suelo en busca de alimento jejejejje Ellos ayudando a remover bien el suelo no sea que se compacte. Qué majos :-)


Bien ya tenemos todos los elementos de la mezcla. Ahora deberíamos remover bien y mezclarlos antes de incorporarlos al suelo de plantación.

Antes de añadirla y mezclarla con el suelo del jardín es preferible cavar bien la zona para poder mezclar correctamente la enmienda.

Echamos la mezcla de enmiendas sobre el suelo del jardín y volvemos a cavar para mezclar bien todos los elementos. Ahora toda la zona tiene un estupendo suelo esponjoso, mullido...dónde el agua no se filtrará con tanta rapidez.

Qué buen aspecto tiene esta tierra. Eh? :-) No se quejarán las señoras azucenas ejjejeje

Recordemos que hay azucenas de enraizado basal únicamente y otras que tienen un doble enraizado (basal y del tallo). Las de doble enraizado requieren ser plantadas más profundamente que las otras.
 
Como el suelo está muy bien trabajado no nos va a costar nada hacer una cavidad con unos 20 cm para alojar en su base los bulbos con doble enraizado. El resto del espacio lo dejaremos rebajado a unos 10 cm.

Vemos como aquí ya están colocados los bulbos en función de la profundidad que requieren según dónde emiten sus raíces.

Tendremos que volver a cubrir con el suelo que ya tenemos mezclado con las enmiendas y la harina de pescado. Con las palmas de las manos presionaremos un poco para que asiente bien el suelo sobre los bulbos. Tampoco en exceso porque están empezando a brotar y no queremos que setos tiernos brotes se rompan.
Antes de regar en profundidad todo el terreno he esparcido un par de puñados de harina de huesos que tiene un alto contenido en P (Fósforo) y Ca (Calcio). Se trata de un magnífico abono orgánico de liberación lenta que aportará buenos nutrientes a nuestras azucenas.
 
Trabajamos ligeramente el suelo para mezclar la harina de huesos con él y regamos sin prisas, en profundidad. Nos interesa dejar ese suelo bien húmedo y que esta humedad no se nos evapore con rapidez.

Esparciremos de nuevo todo el acolchado que habíamos retirado al inicio de la plantación. 

Sólo nos resta un detalle: Los tutores.
Dentro de pocas semanas estos bulbos estarán apuntando sobre el nivel del suelo y serán fácilmente visibles pero ahora están ocultos por el terreno. Señalizar la zona de plantación para evitar pisarla y romper los tallos que pronto empezarán a brotar hacia arriba parece buena idea. Verdad?

Si usamos tutores adecuados para indicar la zona en la que están los bulbos de Lillium, nos serán además para sostener las varas cuando estén bien crecidos.
El año pasado me clavé en la cara un tutor que no vi mientras trabajaba en una zona del jardín. Decidí poner "algo" en el extremo para que no se me "escaparan" de la vista. 
Ummmm creo que voy a pintar de algún color mono estas diminutas macetitas. No sé si en una gama que se disimule entre las flores o mejor lo contrario, en un tono que resalte entre ellas. Esperaré a ver en qué tonos florecen estas azucenas y luego me decidiré.

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