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Los bancales del huerto de nuevo en funcionamiento

Quizás debería haber esperado hasta finales de mes. Pero ya son varias semanas que me llevo con los planteles comprados. Justo comprarlos y ver que las temperaturas bajaban en picado así que como os comenté, los trasplanté provisionalmente a contenedores de fibra de coco o de turba prensada para que pudieran ir desarrollando sus raíces y creciendo y los he tenido cubiertos por la noche con una manta térmica y cuidando por supuesto de que no les faltara riego.

Aunque es cierto que algún año se ha producido alguna helada tardía durante este mes, realmente es muy poco probable que ya se produzcan más a partir de ahora. He mirado las previsiones para los siguientes quince días y las temperaturas nocturnas parece que no bajaran demasiado de los 10º C. Así que me he decidido a empezar el cultivo de los plantones en el huerto. 
En febrero desmonté del todo los bancales. Los limpiamos bien de malas hierbas y restos de hortalizas de la temporada pasada e incorporamos una generosa capa de estiércol maduro que trabajamos muy superficialmente. Lo hemos dejado así durante estos meses para que el estiércol terminara de compostarse bien y el sustrato estuviera en su punto cuando llegara el momento de poner los planteles en él.

Durante este tiempo, la lluvia, el sol ha endurecido una pizca la superficie del sustrato y lógicamente han crecido alguna mala hierba en él. Para trabajar más cómodamente he retirado provisionalmente la cuadrícula de listones de madera de cada bancal.

Antes de plantar he preferido trabajar muy superficialmente la capa de arriba del sustrato de los bancales para romper bien la ligera costra y que se aireara bien el sustrato y he aprovechado para eliminar cualquier resto de malas hierbas. Un suave rastrillado para alisar bien la superficie, poner de nuevo las cuadrículas y un buen riego en profundidad y listo!! El suelo está listo para recibir los plantones.

Ya sabéis que mis conocimientos sobre temas huertiles no son demasiados así que siempre ando consultando todo antes de hacerlo porque no tengo seguridad y temo equivocarme. Sé que las hortalizas no deben cultivarse año tras año en los mismos lugares de plantación porque eso no les favorece nada en su nivel de saludo. Del sustrato toman algunos elementos y aportan otros y cada año se cultiva el mismo tipo de hortaliza en el mismo bancal, algunos nutrientes terminan por ser deficitarios.
Este año también he hecho un pequeño croquis antes de plantar definitivamente tratando de distribuir las hortalizas de modo que la proximidad entre cada variedad fuera viable. Así he tratado de que hortalizas de la familia de las brasicáceas como por ejemplo las berzas no estuvieran junto a tomates. Por el contrario, he plantado cebollas a lo largo de las hileras de tomates porque según algún programa de horticultura que he consultado (Kitchen garen aid), su proximidad resulta beneficiosa para ambas.


La verdad es que es hasta divertido este tipo de ayudas informáticas. Cuando vas con el icono de la col a ponerlo al lado de un tomate te avisa!! jajajaj Es un poco como jugar a mover las fichas dentro de un tablero. En fin, no estoy segura del todo, pero creo que no he puesto una al lado de otra, hortalizas que sean incompatibles.
El año pasado me pasó lo que le pasa a los novatos, que se producen sorpresas desagradables por no tener los conocimientos precisos. Resulta que los pimientos que crecieron cerca e las guindillas vascas estaban picantes! Luego he leído que aunque las hortalizas son autopolinizantes, puede haber cruces entre ellas y de hecho se producen frecuentemente. Por eso este año también he tenido en cuenta no poner por ejemplo pimientos de variedades distintas uno al lado del otro y aunque en un huerto con tan pocos bancales como el mío en el fondo todo está próximo, imagino que a la hora del tema cruce de polen siempre dificultará algo las cosas que no estén tocándose.
Una vez hecho el pequeño croquis simplemente he ido colocando cada plantel en el lugar que previamente tenía asignado en el ordenador.


Al tratarse de bancales elevados rellenos con sustratos son muy fáciles de trabajar y de plantar en ellos. Está esponjoso, suelto y hacer los hoyos de plantación es bien sencillo en ellos. Cada plantel un hoyo y en el fondo un par de puñados abundantes de humus de lombriz. He ido mezclando ligeramente con la misma mano este humus con el suelo de algo más abajo y luego he procedido a plantar tapando las raicillas de los pequeños cepellones de los planteles. Tomates y pimientos un poco hundidos, unos centímetros de su tallo metido en tierra para que emitan raíces y conseguir con ello que la planta sea más fuerte.
Como mi ritmo de trabajo es sumamente lento, he precisado de mucha ayuda allí dónde sentada en mi silla de jardín portatil no alcanzaban los brazos pero bueno, estoy contenta porque al menos parte de este trabajo lo he hecho yo también de forma directa.
Compré demasiados planteles y no me han cabido todos en los bancales. Las lechugas las he tenido que plantar a los pies de los frutos rojos que cultivo en una de las esquinas del huerto. Seis matas de tomates tendré que cultivarlos en contenedor y ya veremos dónde las ubico y otros seis planteles de alcachofa tendré que pedir que me trabajen el suelo de un rincón del huerto junto al portón de entrada y seguramente me decida a ponerlos allí.


Qué bonitas son las pequeñas hortalizas una vez puestas en los bancales y qué ilusión me hace comenzar la temporada de huerto de nuevo. Son como de juguete!! 
Cuando llega el otoño y se desmonta el huerto siento alivio porque es menos trabajo pero luego, tras la parada de los meses invernales me empieza a entrar las ganas de cuidar de él de nuevo.
Ya que estaba me he dejado puesto los tutores sobre los que tendré que ir sosteniendo las tomateras, calabacines, pepinos y pimientos cuando crezcan. Al final hay que ponerlos así que mejor tener la labor hecha. No creéis?




Poner en funcionamiento el huerto tiene bastante trabajo porque además hay que renovar los sustratos de las macetas en las que se suele tener aromáticas y algunas anuales o sustituir la capa de arriba para aportar nutrientes que precisaran ahora que vuelven a estar activas. 
También hay que limpiar de malas hierbas el camino y la zona que bordea los bancales para evitar el contagio de plagas y enfermedades.
En fin, mi huerto está listo para comenzar este año. De momento regaré a mano, en breve tendré que volver a poner el programador de riego y empezar a poner en funcionamiento el riego por goteo.
Así ha quedado una vez terminadas las plantaciones. Qué limpito y ordenado se ve... sé que soy algo tiquismiquis con esto de los huertos pero no lo puedo remediar, detesto el aspecto desaliñado y cutre que veo en muchos huertos. Es manía mía, lo sé...pero me gustan los huertos bonitos y alegres y estoy deseando que el semillero de flores que puse hace unos días siga germinando. De momento ya lo han hecho seis de diez, a ver si en estos días próximos terminan por germinar las otras cuatro variedades.

En cuanto pueda trasplantarlas traeré las plantitas al huerto para que crezcan entre las hortalizas o junto a ellas y además de alegrar y embellecer el aspecto del huerto contribuyan con sus flores a que vengan más insectos y la polinización de las hortalizas sea más fácil.
Prefiero los huertos así, hortalizas, flores y rosas... bonita combinación, al menos para mi :) 

Cuando hemos terminado el trabajo los últimos rayos de sol de la tarde caían sobre el la parte central del jardín y los árboles proyectaban ya largas sombras. Mientras, de camino a casa, andaba por el camino que bordea el seto sur vi a lo lejos dos palomas torcaces de buen tamaño. Solo pude tomar esta fotografía en la que apenas se aprecian pero que si la ampliamos y miramos con detalle, aunque con poca nitidez, se ve la parejita picoteando entre las plantaciones... qué lindas ellas!! (Y qué cansada yo ajajjaa) ;)

Trasplante provisional de planteles antes de plantar en los bancales del huerto

Son tantas las ganas que tenemos de comenzar la temporada de huerto que en ocasiones nos precipitamos y nos adelantamos demasiado en el tiempo a la hora de comprar los planteles.

Eso me ha pasado a mí este fin de semana. 
Me llevaron a un vivero y quién sufre la tentación de traerse para casa una buena variedad de planteles de hortalizas que ves allí? Yo, no. Desde luego!!
El invierno ha sido tan largo y el huerto está tan vacío que la impaciencia te mata. Y luego también piensas que vete a saber cuándo será posible que puedan trasladarte de nuevo a un vivero y que cuando pudiera ser quizás ya están muy escogidos y quedan los que está en peores condiciones. 
Así que nada, me traje cuatro variedades de tomate (de pera, rosa, Cherry y Montserrat) a ver si este año logro que me den alguna cosecha digna porque lo que es hasta ahora la verdad es que o no he tenido suerte o debo estar haciendo algo mal porque muchos tomates lo cierto es que no he logrado recoger de momento.



Cada año me pasa igual, me cuesta bastante encontrar planteles de berenjenas blancas. Ayer llegué a pensar que no había pero por fin, después de mucho rebuscar encontré un pack de seis que estaban en buenas condiciones. 
Esta vez además de hortalizas que ya he cultivado en temporadas pasadas como la guindilla vasca o lechugas hoja de roble, me he animado a probar a ver qué tal se dan algunas hortalizas que no he cultivado nunca. 
Por ejemplo traje berza gallega porque me encanta hacer caldo gallego y me resulta muy difícil comprarla en los puestos de verdura que ponen en la plaza de mi pueblo. También traje berenjenas de Almagro que lo cierto es que no me entusiasman en absoluto las que como compradas pero por "enredar" y porque soy una antojadiza jajajja
Traje también, a sabiendas de que no tengo un clima adecuado, unas matitas de alcachofas y no me pude resistir a comprar un par de macetinas de berros de agua y es que están tan ricossssss!!
Indudablemente eché al carro una mata de sandía amarilla. Sí, digo bien, amarilla!! No ligeramente amarilla...no, amarilla como un limón!! Me trae recuerdos de cuando niña. Mi abuelo no sé de dónde sacaría las semillas pero siempre cultivaba unas hileras de unas pequeñas sandías que a mí me parecían preciosas!! Con su carne de un bonito color amarillo sobre las que contrastaban sus pipas negras brillantes... Qué bonitas eran! Y qué dulcessss!!
Este año no he traído calabacines normales, me he animado a comprar calabacines redondos. Porque son más ricos? No. Porque son más bonitos! ajajjaja :-) Ay...cómo es una!!
En realidad siempre pienso que no seré jamás una buena hortelana porque trato el huerto como si fuera un jardín. Sé lo que me digo, prima más el sentido estético que la producción, pero bueno, a la vez también voy aprendiendo. No al ritmo que aprendo jardinería porque mi interés por las cosas relacionadas con al huerta no pueden compararse con al curiosidad y atracción que siento por el jardín, pero indudablemente poquito a poco voy cogiendo algo de experiencia con las hortalizas. Tampoco aspiro a ser una gran entendida. Simplemente a cultivar las hortalizas para hacer los gazpachos del verano (tomate, pimento, cebolla, ajo, pepino...) y luego ir introduciendo otras que me haga gracia cultivar más que por el rendimiento que tengan, por la novedad que para mí representa su cultivo y por el aprendizaje que de ello saco.
En fin, el asunto es que para mañana pronostican heladas y para pasado nieve. Es posible que no llegue  nevar pero indudablemente la bajada de temperaturas será importante y lo cierto es que ya esta tarde estaba levantando un viento muy frío
Mi idea al comprar todos estos planteles era aprovechar que mañana venía mi ayudante y que pudiera plantarlos en los bancales pero en vista de las previsiones no he querido adelantarme y arriesgarme a que se congeles o se deshidraten con un viento ta frío como el que sopla.
Los planteles son tan chicos que si no los ponía en los bancales corría el riesgo de que se deshidratara enseguida el sustrato de sus diminutos contenedores pero aún estando plantados en tierra, el viento fuerte y frío también hacía posible que provocara en ellos estrés hídrico y se castigaran demasiado.
Así que he decidido hacer un trasplante provisional en tanto no mejora definitivamente el tiempo.
Tenía comprado de hace bastante unos estupendos contenedores de fibra de coco. Tiene de bueno el hecho de que el material con el que están hechos permite no tener que sacar de ellos los planteles cuando los tenga que poner en los bancales de huerto. Se plantan dentro de la tierra y las raíces los traspasan, desintegrándose poco a poco entre la tierra y llegando a desaparecer. Esto es una estupenda cosa porque así no hay riesgo de que las pequeñas raicillas se rompan al trasplantar a tierra.
La parte del jardín trasero que hay frente a la puerta de la cocina es la de más fácil acceso para mi. Ahí puedo sentarme tranquilamente y ver como van los planteles además de regarlos.
He hecho una mezcla con sustrato de esquejes y plantación mezclado con una buena cantidad de humus de lombriz. Con esta mezcla y en contenedores mucho más grandes será difícil que se deshidraten. Además de que podrán ir nutriéndose en tanto van generando sus pequeñas raicillas cuando se adentren en el sustrato circundante.
Los tomates me gusta ponerlos con el tallo un poco hundido para que esa zona del mismo que queda cubierta con sustrato pueda emitir raíces y así posibilite que la planta sea más fuerte. Por eso he puesto los plantones directamente sobre la base de los contenedores de fibra de coco y he rellenado con sustrato.

Los pack, al estar juntos, no original confusión de las variedades que contienen pero una vez se separan para trasplantarlos a contenedores individuales resulta imprescindible colocar los planteles de las mismas hortalizas bien etiquetados y juntos unos a otros para saber luego de qué variedad se trata.
Una vez bien regado todo me han colgado una manta térmica prendida de la valla metálica cubierta de hiedra. Para que le viento no llegue a levantarla he puesto unos tiestos con peso en sus extremos.
Creo que así estarán protegidos estos días de las posibles heladas y de la nieve. Dentro de unos días seguramente el tiempo mejorará y las temperaturas se harán más suaves ya definitivamente adentrados en la primavera. Será el momento de llevar los pequeños planteles al huerto para comenzar a cultivarlos allí.

La compra de planteles de las hortalizas del verano y la plantación de las cebollas.

Los sábados suele venir a mi pueblo un hombre con una furgoneta blanca, a rebosar de plantones de todo tipo de hortalizas. Alrededor del vehículo el buen hombre saca su mercancía. Sin etiquetar, sin marcar variedades, ni tampoco el precio ajajjaja Bueno, así se hacen a veces las cosas en los pueblos y generalmente no salen tan mal como pudiéramos pensar. Tiene fama de tener buen género así que como el tiempo se me va echando encima no quise aplazar más la compra de los planteles para poder cosechar este verano lo necesario para hacer los muchos gazpachos que tomamos.
Ya me va quedando sitio en los bancales según voy cosechando las hortalizas que planté en invierno y ya hace algunas semanas que corría prisa hacerse de estos plantones. No voy a poner en principio gran cosa más. 

Quiero que este primer año de huerto no me complique la vida, que bastante tengo ya con el jardín. Ir poco a a poco. Aprender a qué ritmo crecen, cuánto riego precisan, cuándo se cosechan... en fin, no aspiro a pasar de un nivel muy básico. Ya tendré tiempo de avanzar en técnicas y conocimientos...por ahora familiarizarme con estas nuevas invitadas a mi jardín :)
Llegué al puesto de venta con la idea de comprar unas matas de tomates, pepinos, pimientos verdes y rojos, cebollas y ajos, que en mi ignorancia creí que era momento adecuado para su siembra (pues no, otro aficionado a la huerta me informó que era mejor aplazar la plantación a febrero)..
Pero lo que pasa, que llegas al puesto y ves tanto!! jjaajjaj Cómo no iba a pasar con los plantones si nos pasa con las plantas ornamentales. Verdad? :) Así que me "dejé convencer" de la necesidad de tener unos melones, unas berenjenas blancas y calabaza!! jajajaj Para qué querré yo plantar calabazas? Pues porque son bonitas. Sencillamente es eso!! Son preciosas!! Tampoco pude resistirme a comprar "Plantas del huevo". Quién iba a resistirse con ese nombre? Que por cierto, no dejan de ser berenjenas blancas! Pero qué preciosas deben ser las plantas, no? Con sus frutos blancos colgando!! :D
Imaginé las bonitas hojas de la calabaza llenando el suelo alrededor de los bancales más altos y aportando un aspecto frondoso al huerto, añadí al "cuadro" unas matas de capuchinas de llamativo color naranja serpenteando cerca de las calabazas y el conjunto en mi cabeza me pareció irresistible! jejeje No lo pensé dos veces: "Échame un par de plantones de calabaza, Juan...ummmm y dos de pepinos de los españoles" y Juan metió en la bolsa de plástico blanca de las corrientes un par de diminutas plantitas junto a los tomates y pimientos que ya tenia dentro. Pero se olvidó de algo, de las calabazas o de los pepinos porque cuando llegué a casa uno de los dos me faltaba. Menudo problema!! de Plantar pepinos a calabazas va un trecho así que he puesto en un foro una imagen de estos plantones que tengo sin identificar a la espera de que un alma caritativa me diga si lo que Juan me echó en la bolsa eran calabazas o pepinos. En fin, cosas de no pasar por caja y de que no haya códigos de barras en estas compras :) Bueno, algo de intriga hortelana. No está mal tampoco!!
En fin, que era cosa de no dejar que los plantones se sequen así que empecé por plantar las berenjenas blancas y el manojo de cebollas.
He tenido que informarme, no creáis. Ni idea de cómo se hacía esto de plantar cebollas. Bueno, la cosa, según las explicaciones que me han dado no parece muy complicada. Cortarles un buen trozo de la parte verde.
Hacer el hoyito con el plantador e ir introduciendo cada plantón de cebolla hasta que queden ocultos bajo tierra la raíz y la parte blanca y sobresaliendo el resto verde que se ha dejado sin cortar.
Cubrir con tierra apretando alrededor con delicadeza y un buen riego. No hay más ciencia :) Ya veremos los resultados!!
La distancia? La que marca la lógica. Que haya espacio suficiente entre los dos plantones para que cuando la cebolla engorde (si es que logro que engorde jejejje) no lleguen a tocarse unas a otras.
Y después cuidar la hidratación y no permitir que los plantones lleguen a sufrir de sed pero acostumbrarlos desde el principio a cierta "escasez" para que echen raíces ahondando en busca de humedad y se hagan fuertes. Esta es una advertencia que me han hecho frecuentemente así que yo, obediente, una vez por semana riego el huerto ahora. Cuando vengan los calores incrementaré la dosis de agua.
He ido metiendo algunas cebollas más en los huecos que se van produciendo, entre las hortalizas van creciendo en los bancales desde el invierno.
Luego planté los pimientos verdes, los rojos  y las tomateras. Qué graciosas!! Algunas tienen tomatitos diminutos!! Cómo me gusta esto del huerto!1 :) Tengo que hacerme con alguna variedad más de tomates, de momento Juan solo tenía de las variedades kraft y unos que me dijo que eran "morunos", en sus palabras "de los de aquí de esta zona, de los de siempre" Descripción que me dejó exactamente en la misma ignorancia que tenía antes de preguntar ajajjaja y que no tengo demasiado claro que "moruno" no sea más que un calificativo que le dan en distintas zonas de España a los tomates más normales de cada zona sin coincidir unos con otros. Vete a saber cómo serán estos tomates que me ha vendido!! :) Pero seguro que estarán ricos ;). Terminé la tarde poniendo dos matitas que tengo una especial ilusión en que se me den bien. Me las ha enviado por correo una amiga, Cruz, y son tomatitos Cherry. A ver si soy capaz de cuidarlos adecuadamente para que produzcan preciosos tomates!! De momento ahí están....tan chiquitos!! Gracias Cruz!!! ;)

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